lunes, 22 de junio de 2015

LA BÚSQUEDA DE SENTIDO



Sergio García Díaz

No necesitas perder algo para buscarlo. Muchas veces buscas algo por el simple hecho de quererlo. Tu punto de partida es la no-posesión y con ello el no-disfrute de eso que te dispones a buscar. No se disfruta lo que no se tiene y no se tiene lo que no quiere disfrutarse. Por ejemplo, buscas empleo, salud, amor, paz, conocimientos, amigos, experiencias (de todo tipo).
¿Pero sabes qué hay en el fondo de todas tus búsquedas? La búsqueda por excelencia: la búsqueda del sentido de tu vida. Así es. Buscas porque estás vivo, porque siempre quieres lo mejor para ti, porque necesitas, porque eres capaz de encontrar y de regocijarte en eso que tanto anhelas. Cada una de tus búsquedas completan tu sentido de vida, te hacen sentir independiente, un ser autónomo y autor del guion de tu vida. Por eso, aunque no lo hayas pensado así, todo lo que haces o no haces, te acerca cada vez más a ese goce que te da sentirte pleno y armado en tu estructura de persona desde lo más íntimo.
Cierto que por momento no sabemos ni qué queremos en la vida, nos podemos sentir confundidos, pero también es cierto que eso no impedirá que sigas buscando, ¿qué? Lo que sea, lo que se te aparezca te parecerá sorprendente, porque no era que no buscaras, era que no sabías qué. Cuando tiene bien claro qué quieres para ti, tus búsquedas serán intencionadas y con objetivos claros, entonces no te conformarás con cualquier cosa que se cruce en tu camino. Vas a la segura porque estás claro en lo que buscas, es más, no te desvías de camino por más que haya quien intente jalarte hacia sus propias búsquedas. Si coincides con alguien y compaginas búsquedas, específicamente la del sentido de la vida, es cuando caminas a la par de alguien, hay apoyo, incluso amor. Te das cuenta que también las otras búsquedas tienen aspectos en común y eso es todavía mayor alegría para ti, y para la otra persona.
Recuerda que el goce no sólo se te presentará al final de todas tus búsquedas (el final de tu vida), sino que cada momento de cada búsqueda es ya un goce siempre que sea lo que quieres. Por eso insisto en que saber lo que uno quiere para sí es bien importante si queremos vivir así, con ganas de vivir, y no nada más por vivir, como si la vida fuera un peso que hay que aguantar. Y si sabes que quieres lo bueno para ti, trabaja en tus pensamientos, en que sean tan fuertes como quieras que lo sean tus búsquedas, tan claros y seguros como tus propias búsquedas, tan tuyos como lo es tu vida.
Así que siéntete bien contigo al saberte un “buscador” y regocíjate en cada logro durante tu camino. Recuerda que no estás solo. Sonríe, habla, grita, canta, baila, haz lo que te plazca, pero procura buscar bien, bien para ti.


04/10/2014

Etiquetas: ,

0 comentarios:

Publicar un comentario

Suscribirse a Enviar comentarios [Atom]

<< Inicio